Lo barato sale caro

(MATERIAL EXCLUSIVO PARA MEDIOS IMPRESOS. QUEDA PROHIBIDA SU PUBLICACIÓN EN INTERNET)Los reguladores mexicanos deben aprender de los errores cometidos por su contraparte europea.Por José Luis de la Cruz GallegosMEXICO, D.F., noviembre 30 (EL UNIVERSAL).- Lo habíamos comentado, si México desea superar los desafíos estructurales que enfrenta debe transformarse, debe cambiar para progresar. Si el país continúa con la misma inercia solo verá exacerbar los desequilibrios que vive, y que le han llevado a profundos problemas de inseguridad y marginación.

Se deben crear programas de desarrollo económico y social realmente productivos, de perfil industrial, que sean complementados con programas de desarrollo social. Es la mejor manera de aumentar el valor agregado, el contenido nacional y el empleo formal bien remunerado, el verdadero mecanismo de movilidad social que la nación requiere.

Es prioritario elaborar un acuerdo productivo con el sector privado y los trabajadores, orientado a solventar los problemas de pobreza y precariedad laboral. Para que sea sustentable debe tener una base productiva, en donde las empresas sean el motor de crecimiento y de distribución de la riqueza.

Para avanzar el país debe olvidar aquellos paradigmas que fragmentan, que impiden crear una Agenda Mínima por México.

El liderazgo en ese sentido debe ejercerse desde el sector público, básicamente porque las reformas estructurales aprobadas han cambiado el marco institucional y las reglas del juego, pero no han modificado a las instituciones ni a sus actores.

Los funcionarios se han desarrollado con incentivos y paradigmas basados en estrategias y políticas públicas con una orientación que negó el fomento económico a la empresa nacional como mecanismo para alcanzar mayores niveles de crecimiento y de empleo formal.

Sin el sector privado los planes de gobierno son insuficientes para alcanzar metas más ambiciosas, ¿Cómo elevar la productividad de cuatro millones de empresas sin su participación?

Intentar solventar viejos problemas con esquemas añejos es una invitación a permanecer en el círculo vicioso de políticas públicas que ya han demostrado que no son el instrumento adecuado. El presupuesto público y la política fiscal no alcanzarán para hacerlo, atender a 60 millones de personas pobres por ingreso no puede lograrse con recursos públicos, nunca alcanzarán.

El anuncio de la estrategia dedesarrollo integral...

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