'Me da coraje que la gente piense que es mentira'

Horacio Jiménez

CIUDAD DE MÉXICO, mayo 13 (EL UNIVERSAL).- Jazmín tiene 24 años y todos los días de 7 de la mañana a 5 de la tarde se enfrenta cara a cara con el coronavirus. Es dentista por la UNAM, pero también es laboratorista y a diario acude a 10 domicilios de pacientes a tomar muestras, jugándosela para no contagiarse.

La profesionista vive con su madre, quien vende dulces y la contingencia no le ha permitido salir a ganar dinero. Ahora, ella es la única que aporta recursos a su hogar.

A pesar de lo riesgoso y el miedo que le invade todos los días debido a un posible contagio de Covid-19, el laboratorio particular, que cobra casi 3 mil pesos por cada prueba que realiza, le acaba de informar que de los casi seis mil pesos que gana al mes, le van a descontar 33% "por las bajas ventas y la crisis en la que encuentra el país".

Todos los días se levanta a las 6 de la mañana para entrar a trabajar a las 7. Pese a que el laboratorio para el que trabaja solo le proporciona cubreboca y goggles, ella se ha preparado y ha conseguido por el lado de odontología, otros insumos de protección para cuidar su salud y la de su familia.

Dos de sus compañeras, jóvenes que no rebasan los 25 años, ya se contagiaron. A una la reportan muy grave y se encuentra intubada, pese a ello, describe que el laboratorio no los exenta del pago en caso de tener que hacerse la prueba del Covid.

"Me da más coraje que miedo que a pesar de lo que nos estamos exponiendo, nos hayan puesto entre la espada y la pared, o firmas la reducción del sueldo o la renuncia. Sí hubo quien renunció y dijo: 'No me voy a exponer para que ni siquiera me estés pagando mi sueldo'. Yo estuve a punto de renunciar, yo estoy en capital humano, pero dije: 'Necesito el seguro y una entrada porque ahorita mi mami no está vendiendo' y me tuve que quedar", relata.

Cada día al llegar a su trabajo se coloca la indumentaria quirúrgica: bata, tenis, cubreboca, goggles, careta, guantes, gorro de tela y encima otro desechable: "Me voy completamente protegida. Visitó 10 domicilios porque son largas las distintas y sólo da tiempo de 10", y ya en la sucursal, que montó una estación ambulante, se atienden diariamente a otros 30 pacientes.

Todos los días la acompaña otro compañero, quien es el que maneja, pero ella es la única que entra...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR