Diario íntimo de Lulú Petite

Lulú Petite

EL GRÁFICOQuerido diario: Me gusta estar recostada en tu regazo. Siento el calor de tu piel húmeda. El vapor de la bañera aún empaña los espejos. Tú sonríes.

Me das un beso. Me gusta tu sabor. Paso mi mano por tu pecho desnudo y recojo con mis dedos las gotas traviesas que te trajiste de la ducha.

Siempre te das un regaderazo antes de coger. Según tú, te relaja. Cargas siempre una maletita muy discreta con tu jabón de ducha y tu champú. A veces pienso que eres más coqueto que yo. Antes de meterte a la cama, te pones desodorante y un perfume delicioso, del que no me has querido dar el nombre.

Cuando me dejaste de besar, comencé a lamer tu pecho. No sé por qué, pero me dieron ganas. Bajé mi mano por tu vientre y mientras llevaba tus pezones varoniles a mi boca, agarré la piel desnuda de tu miembro erecto y comencé a masturbarte. Gemías.

Yo acaricié tus bolas y luego regresé al tallo, a jalarlo como te gusta. Sentía la piel suave y las venas llenas, tu miembro rígido. Subí a tus labios donde tu boca, entreabierta, me esperaba para comerme a besos.

Seguí jalando, mientras tu lengua...

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