Reconstrucción lenta de vidas
(Material de EL UNIVERSAL+)
HERMOSILLO, Son., junio 5 (EL UNIVERSAL).- Davinia coquetea en cada paso como modelo de pasarela. Sonríe, acaricia su cabello y abre sus enormes ojos para llamar la atención.
Esta "divina belleza" -significado de su nombre-, de 7 años de edad, lleva ya 19 cirugías de reconstrucción. Es una sobreviviente del incendio de la guardería ABC.
En el Hospital Shriners, de Sacramento, California, están sorprendidos por la naturalidad con la que la niña asume las heridas que le causó el fuego en 50% del cuerpo. Las llamas consumieron una parte de su cabello, le carcomieron el brazo izquierdo, los pies, parte de las piernas, el abdomen y la espalda.
Con las cirugías, todas practicadas de manera gratuita, ha podido recuperar su movilidad en las extremidades. El cabello le ha crecido y en unos años su piel quemada podrá ser sustituida por nueva.
Ahora, además de los recuerdos, Davinia tiene adherido a su pecho un extensor que le permitirá estirar y producir piel por sí misma para que pueda ser usada como injerto.
La reconstrucción terminará cuando cumpla 21 años de edad, etapa en la que los médicos aseguran que su crecimiento habrá cesado.
Aidé Montoya, madre de Davinia, comenta que los gastos de transportación, hospedaje y viáticos están a cargo del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). "Es lo menos que pueden hacer ante su responsabilidad en la tragedia, y la atención médica deberá ser de por vida", consideró.
Asegura que fue en Estados Unidos donde su única hija pudo recuperar la vida. Después del incendio, Davinia fue trasladada de emergencia al Hospital de Occidente, en Guadalajara, Jalisco. "Mi hija llegó en estado crítico (...) le querían amputar el brazo izquierdo, pero decidieron enviarla a Sacramento, y en el Hospital Shriners se lo salvaron".
Davinia estudia el segundo año de primaria, pero la vida cotidiana que esta familia -conformada por la niña y su mamá- tenía antes del 5 de junio de 2009, se ha truncado. Aidé ha dejado su trabajo al frente de una empresa privada para poder estar con su hija en el proceso de tratamiento, pues cuatro o cinco meses del año se los pasa en los quirófanos de Estados Unidos.
Aidé Montoya es integrante del Movimiento Ciudadano por la Justicia 5 de Junio, y como activista considera que formará parte de esta lucha hasta que se haga justicia, "porque mi hija no tiene por qué estar pasando por tantas cirugías. Cada año hay angustia, porque en la cirugía hay anestesia y eso siempre...
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