Lucha antinarco impacta en lenguaje

(16 del tercer presupuesto; embargada para sitios en internet hasta las 24:00 horas locales)José Luis RuizMÉXICO, D.F., enero 21 (EL UNIVERSAL).- La cruenta lucha contra las organizaciones del narcotráfico, y la batalla sangrienta entre éstas, no sólo ha trastocado el ambiente social y vulnerado la paz en el país, también ha impactado el lenguaje para referirse a este fenómeno y a sus diversas y dramáticas consecuencias.Es frecuente leer y escuchar referencias específicas para tratar de describir con precisión hechos ligados al narcotráfico o al crimen organizado.Palabras como "levantón", "ejecución", "encajuelados", "encobijados", "sicarios", "narcos", "descabezados", "narcofosas", "narcocorridos", "narcomantas", "plazas", "sicarios" o "cárteles", entre otras, forman parte de una jerga cotidiana para describir este nuevo entorno de violencia que se registra en una gran parte de México.Marco Lara Klahr, periodista e investigador, y autor de diversos libros, entre ellos, Hoy te toca la muerte y Días de furia, explica que una vez que se utilizan clichés mediáticos como "muertas de Juárez", "narcos", "encajuelados", "encobijados" o "levantados", entre otros, lo que se está haciendo es quitar todo el sentido dramático y trágico a un suceso criminal."En otras palabras, estamos quitándole a la persona el carácter de víctima, y la estamos criminalizando", comenta Lara Klahr, coautor con Francesc Barata de Nota(n) roja: Historia de un género y una nueva forma de informar.Asegura que cuando se dice "encajuelado", "descabezado", también se está estigmatizando a una persona que para empezar es una víctima, independientemente de su estatus ante la ley."El hecho de que haya delinquido o trasgredido la ley, no implica que se le deba cortar la cabeza. Entonces, con el uso de este lenguaje, un hecho atroz se asume como normal", explica.Incluso, considera que al ponerle un cliché a un suceso criminal, en ese momento se le está confiriendo a la víctima la responsabilidad sobre su propia muerte atroz, en lugar de atribuir el hecho a un grupo delincuencial o al sistema judicial por su incapacidad para aclarar algún caso de violencia."Sencillamente nos contentamos diciendo que la víctima se lo merecía", opina Lara, quien aduce que en esa interacción, poder judicial, procuración de justicia, policía y crimen, se va creando una simbiosis del lenguaje."Entonces se va creando una especie de comunidad semántica y de visiones sin que puedan separarse claramente y sin...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR