La sabandija de oro

Arlequín

EL UNIVERSALY usted ya se preguntó quiénes son las "sabandijas" que militan en Morena, a las que hace referencia la propia presidenta del partido, Yeidckol Polevnsky. Nombres, nombres, queremos nombres doña Yeidckol.

"Son muchas las sabandijas que se nos han infiltrado, son muchos los que están echándole el ojo al partido de una manera mezquina y perversa, porque están pensando que el partido tiene mucho dinero", dijo esta semana la presidenta de Morena.

Pero como la señora Polevnsky no tiene el alma negra, prefirió no dar, por el momento, las identidades de estas alimañas.

Primero que nada no se asuste, las sabandijas no son los primeros reptiles e insectos ponzoñosos que aparecen en el lenguaje político de alto nivel.

Baste recordar al ínclito presidente Vicente Fox con sus tepocatas, alimañas y víboras prietas, o el siempre estimado y hoy ?según las encuestas- bien ponderado-, Andrés Manuel López Obrador con sus famosas chachalacas.

Dada la discreción y prudencia, que caracterizan a la señora Polevnsky, no queda otro camino que tratar de que juntos encontremos los nombres de esas posibles sabandijas infiltradas.

¿Se referirá acaso a aquellos y aquellas ?otro foxismo- que votaron en contra de la candidata del presidente López Obrador a la Suprema Corte de Justicia de la Nación?

Estas "sabandijas" se atrevieron a comparar al señor presidente López Obrador, con el copetudo Peña Nieto al decir que estaba tratando de imponer a la esposa de su amigo y asesor José María Riobóo, la entonces magistrada Yasmín Esquivel, como ministra de la Suprema Corte de Justicia, tal y como lo hizo el priista con el ministro Eduardo Medina Mora.

Vaya alimañas, pensar que AMLO es lo mismo que EPN. Para empezar, hay que aceptar que sí, que doña Yasmín es esposa de don José María; que sí, que don José María es amigo de AMLO y que sí, sí ha sido en otros tiempos beneficiario de obra pública y hoy lo asesora. Pero ¿y eso qué tiene que ver? ¿Dónde ve usted algún posible conflicto de interés? Son todos amigos, cuates, carnales, pero hasta ahí.

En segundo lugar, se necesita ser verdaderamente venenoso para pensar que una vez que doña Yasmín esté sentada en una de las 11 sillas del máximo tribunal de este país, favorecerá al gobierno o AMLO con sus fallos, que no tendrá autonomía.

Sí, es cierto, el Presidente la nominó y la apoyo; sí, es verdad que el partido del Presidente la impulsó. ¿Pero y eso qué tiene que ver con la autonomía? Le repito, son amigos...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR